El aumento de la delincuencia e inseguridad en Bogotá no para, pues con el pasar del tiempo no aparenta alivios, no distingue de estratos o clases sociales, afectando a los habitantes en sus barrios en las 20 localidades, reflejando de esta manera limitaciones para alcanzar una calidad de vida en las diferentes familias.
Ante esto los ciudadanos se sienten intranquilas al no saber si agentes de policía, como parte de los planes para mitigar la criminalidad son efectivos, debido a que se presenta un fenómeno social que involucra acciones ilegales contra la población.
Pues hace poco se conoció un nuevo caso de inseguridad en la localidad de San Cristóbal, sur de Bogotá, un ladrón abordó a cuatro estudiantes de un colegio y los amenazó con arma de fuego para quitarles los celulares. Las víctimas, de 13, 14 y 15 años, no tuvieron más opción que acceder y dejarse robar.
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Ante los hechos, afortunadamente, la comunidad se dio cuenta a tiempo y alertó a la Policía Metropolitana. Uniformados le siguieron la pista al sujeto y lograron su captura.
El ladrón, que se aprovechó de que los menores iban solos, fue enviado a la URI de Molinos, donde la Fiscalía General de la Nación procedió a su judicialización. Los policías que realizaron el operativo recuperaron los celulares de los cuatro estudiantes del colegio.
