Envigado FC dio un golpe de autoridad en su casa al vencer 1-0 a Millonarios en el partido de ida por los octavos de final de la Copa Colombia, en una noche donde la juventud, la disciplina táctica y la solidez colectiva fueron las claves del triunfo. El equipo antioqueño, dirigido con inteligencia, demostró que su proyecto de cantera sigue dando frutos y que puede competir con jerarquía ante uno de los gigantes del fútbol colombiano.
El gol de la victoria llegó temprano, al minuto 14, gracias a una aparición oportuna de Tomás Santiago Soto Valladares, quien aprovechó un descuido defensivo para marcar el único tanto del encuentro. Además de anotar, el joven mediocampista fue protagonista del partido por su despliegue y compromiso en ambas áreas, aunque también recibió una tarjeta amarilla por cortar una salida rival.
Envigado apostó por un equipo joven pero con gran personalidad, y eso se reflejó en el orden defensivo y la intensidad para recuperar la pelota. El arquero Juan Felipe Holguín, aunque no fue exigido constantemente, respondió con seguridad en los momentos clave. En la zona de volantes, Julián Palacios y Didier Dawson Villareal se destacaron por su movilidad y lectura del juego.
La dirección técnica fue otro factor fundamental. Envigado leyó bien el plan de juego de Hernán Torres, y supo bloquear las bandas, impedir las triangulaciones ofensivas de Millonarios, y forzar a los visitantes a caer en la imprecisión. El ingreso de jugadores como Santiago Londoño y Nilzo Ronaldo en el segundo tiempo dio oxígeno al equipo sin perder el equilibrio.
Una mención especial merece la actitud del equipo en los minutos finales. Lejos de refugiarse, Envigado mantuvo la presión alta y buscó ampliar el marcador, evidenciando que la propuesta no es solo resistir, sino competir con ambición. La expulsión de Dairon Mosquera (salida técnica) y la tarjeta amarilla a Didier Palacios mostraron también la intensidad con la que se jugó.
Este resultado le permite a Envigado viajar a Bogotá con una ventaja importante, aunque mínima. El cuerpo técnico ha sido claro: no se conforman con una victoria ajustada. La mentalidad del grupo es seguir creciendo, aprovechar cada partido para consolidar talentos, y soñar en grande sin perder la esencia formativa que los caracteriza.
En medio de un torneo donde los reflectores suelen apuntar a los equipos grandes, Envigado reafirma que la cantera también puede ser protagonista. El juego de vuelta será una prueba de fuego, pero si algo ha demostrado este equipo es que tiene el carácter y la idea de juego clara para competir en cualquier estadio del país.




