El pasado 18 de febrero se conoció que una niña de nueve años a quien la identificamos J.M por su seguridad habría quedado encerrada en un ascensor en el conjunto residencial Alminar Samoa, de acuerdo, con el pronunciamiento de la madre en el ascensor se encontraba la menor en compañía de su hermano y su padre cuando habrían quedado atrapados por casi 20 minutos tras un apagón por las tormentas eléctricas.
Según la madre de la menor ella habría informado a los celadores y a la administración por lo que estaban pasando sus familiares quien también informó que su hija padece una enfermedad cardíaca y dicha situación habría hecho que la infante sufriera una crisis, ante lo sucedido la madre aseguró que la respuesta de estas personas fue insuficiente y también aseveró que las personas de seguridad no contaban con protocolos de emergencia para actuar en una situación como esa, pero también se pudo saber que esta no sería la primera vez que los residentes pasan por algo así, ya que ya se han presentado varias fallas en el conjunto.
Ante lo sucedido nacen varias preguntas pues esta situación trae varias inquietudes, la primera es ¿Quién regula las administraciones de las propiedades horizontales? ¿Por qué el personal no tiene preparación para estás emergencias?
“¿En qué problema se meten si le llega a pasar algo a alguien aquí? Esto es inconcebible, todos los guardias que están de turno tienen que pasar a los ascensores a ver quién está o quién no, esto puede continuar así, puesto que no solo se refleja este problema en el edificio” concluyó la madre de la víctima.



