En los últimos días se llevó a cabo por parte de la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas, Ubpd la entrega del cuerpo sin vida de un joven campesino identificado como Jhonatan Montenegro, quien habría desaparecido en años pasados al parecer tras salir a realizar un trabajo de dos días. Según lo dicho por la entidad en el caso, el joven un día le pidió a su madre que lo llevara en moto hasta el pueblo para hacer un trabajo e incluso le dejó bajo encargo el cuidado de su mascota, desde este momento su familia no volvió a saber de él.
Al momento de la desaparición Jhonatan era estudiante de bachillerato, de origen campesino, perteneciente al Resguardo Indígena Awá El Sande de Santacruz de Guachavés, y es recordado hoy por su amor hacía las motos, el campo, los cultivos de caña y de café; e incluso por ser aquella persona que ejercía como protector de su madre y sus hermanos.
Con respecto a este caso se conoció que la madre al ser consciente de la desaparición de su hijo dio inicio a su búsqueda en compañía de familiares y la comunidad, para posteriormente recibir el acompañamiento de organizaciones como la Asociación de Víctimas de Desaparición en Samaniego, la Corporación del Resguardo Indígena Awá El Sande y del Comité Internacional de la Cruz Roja.
Sin embargo, fue hasta el 2019, que la Ubpd recibió la solicitud de búsqueda y dando seguimiento a los relatos de la madre, los tíos y los amigos, se inició la investigación humanitaria y extrajudicial. En este camino según lo dicho por la entidad, fueron de gran valor los aportes entregados por excombatientes e integrantes de Corporación Reencuentros.
En julio de 2023, la Unidad de Búsqueda recuperó y entregó el cuerpo de Jhonatan a Medicina Legal – Colombia para confirmar su identidad, sin embargo, un año después, es decir en los últimos días, con el apoyo de la Corporación del Resguardo Indígena Awá El Sande, realizó la entrega culturalmente pertinente a su familia.
En medio de un ritual ofrecido por el resguardo, sus seres queridos, las organizaciones que les acompañan y la comunidad rindieron un homenaje a la vida campesina, sencilla y soñadora de Jhonatan y lo despidieron de este mundo terrenal tras haber recuperado su cuerpo.




