Francy Cuellar asegura que ha sido víctima de una ‘mamadera de gallo’.
En un acto de desesperación, Francy Cuellar, residente del barrio Alaska parte alta, se encadenó frente a la Alcaldía de Ibagué el jueves 13 de junio, buscando respuestas tras años de ignorancia por parte de los funcionarios municipales.
Negligencia
Cuellar, quien fue multada en 2020 por salir sin permiso durante la pandemia, asegura que ha sido víctima de una ‘mamadera de gallo’ por parte de la administración municipal. “Desde septiembre de 2020 no me atienden y desde enero de este año he venido todos los días a la alcaldía y todavía no nos dan una respuesta,” expresó Cuellar, visiblemente afectada por la falta de atención.
Injustificado
La ciudadana explicó que el comparendo fue impuesto injustificadamente y que, a pesar de sus constantes esfuerzos por ser escuchada, no ha recibido ninguna solución. Este incumplimiento le ha costado incluso su empleo, debido a las numerosas visitas sin resultado a la Alcaldía. “Voy a permanecer encadenada el tiempo necesario hasta que me den una respuesta por fin ante mi caso,” declaró Cuellar.
Preocupación
El acto de Cuellar no pasó desapercibido entre los ciudadanos. José Reinoso, uno de los testigos, comentó, “Desafortunadamente, la mayoría de los funcionarios de la alcaldía levitan, solo una pequeña parte hace bien su trabajo y le colabora a la gente.” Esta afirmación refleja el sentir de muchos residentes de Ibagué, quienes también han enfrentado dificultades para obtener respuestas de la administración.
Javier Ferrer, otro ciudadano, compartió su experiencia similar. “A mí para esa fecha también me hicieron un comparendo, pero la patrulla que me requirió me exigió un millón para no dejarme esa noche en el CAI del Jardín y no hacerme el comparendo.
Extorsión
Con gran sorpresa, al día de hoy no sé cuánto debo. Multado y extorsionado,” afirmó Ferrer, resaltando la gravedad de las acusaciones y el descontento generalizado. La protesta de Cuellar pone de manifiesto las fallas en la atención al ciudadano por parte de la Alcaldía de Ibagué y la necesidad urgente de mejorar los canales de comunicación y resolución de problemas para evitar que situaciones desesperadas como esta se repitan.
