El 7 de febrero, en horas de la mañana, la Policía Metropolitana de Tunja atendió un llamado de emergencia a la PDA, en el que se reportaba que un hombre, identificado como Antonio Vides, estaba causando destrozos en una residencia ubicada en el norte, donde también funciona una barbería. Según el informe, Vides estaba rompiendo los vidrios de la vivienda, lo que generó preocupación entre los vecinos de la zona.
Al llegar al lugar, los agentes de policía encontraron a Vides en un evidente estado de alteración. El hombre se encontraba pateando la puerta de la residencia de la cual había destruido los cristales minutos antes, lo que dejó en evidencia su comportamiento agresivo y fuera de control. Ante esta situación, los uniformados procedieron de inmediato a intervenir y controlar al individuo, con el fin de evitar que la situación fuera a más.
Los agentes llevaron a cabo el protocolo de seguridad y detuvieron a Vides, quien, al parecer, no podía explicar de manera coherente las razones detrás de su comportamiento. El hombre fue trasladado a la estación de policía para iniciar el proceso legal correspondiente por daños a la propiedad ajena. Durante el procedimiento, no se reportaron personas heridas ni otros daños adicionales, pero el impacto del acto vandálico dejó a los propietarios de la residencia y los comerciantes cercanos preocupados por la seguridad en el sector.




