Los habitantes del municipio de Santander de Quilichao padecieron una Semana Santa llena de dolor por culpa de los sicarios, que sin importar esta fecha religiosa se encargaron de matar o asesinar a personas que, según ellos, tenían cuentas pendientes por pagar.
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Los hechos repudiables ocurrieron el Jueves Santo y Viernes Santo donde dos personas fueron ultimadas con arma de fuego. Las comunidades en Santander de Quilichao indicaron que el Diablo hizo ‘fiesta’ en esta población donde la alcaldesa no hace nada por garantizar la tranquilidad y seguridad de los Quilichagüeños.
De acuerdo a las informaciones conocidas por líderes de la región, en la vereda Vilachi, distante a 20 minutos del casco urbano, una persona que se desplazaba en calidad de peatón, dos hombres a que se movilizaban en una motocicleta lo interceptaron y le propinaron varios disparos, los cuales acabaron con su vida de manera inmediata.
Conocida la tragedia, los allegados se acercaron a la zona donde confirmaron que se trataba de José Fabián Menza Chocué de 25 años. En medio de una labor humanitaria, el cuerpo fue evacuado e ingresado a las instalaciones del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses donde integrantes de la Sijin se encargaron de llevar a cabo la inspección técnica. La víctima presentaba dos impactos por arma de fuego a la altura de la cabeza con afectaciones en la región occipital y parietal. La Fiscalía inició las debidas investigaciones para tratar de esclarecer los motivos y las causas por las cuales fue asesinado.
Terminadas todas las diligencias, los familiares realizaron los trámites para reclamar los restos mortales y de esta manera en medio del dolor llevar a cabo su velación y honras fúnebres en compañía de amigos y demás dolientes. El hecho de sangre fue repudiado por los habitantes, quienes pidieron a la Administración Municipal en cabeza de Lucy Amparo Guzmán que tome las medidas necesarias para evitar más derramamiento de sangre.
