Erik Alfonso Gómez, un hombre de 36 años, perdió la vida de manera violenta la noche del viernes en un ataque sicarial ocurrido en el Barrio Abajo de Barranquilla. El trágico suceso se presentó a las 09:44 p.m., en la intersección de la carrera 51 con calle 41, cuando un sicario a bordo de una motocicleta lo abordó y le disparó directamente en la cabeza. La víctima falleció instantáneamente en el lugar de los hechos.
De acuerdo con el informe policial, el ataque fue ejecutado con precisión y dejó en evidencia la modalidad violenta con la que operan estos criminales en la ciudad. Los testigos en la zona quedaron impactados ante el atroz asesinato, mientras las autoridades realizaban el levantamiento del cadáver en medio de la vía pública. La situación refleja la creciente inseguridad que afecta a Barranquilla y otros sectores urbanos del país.
En misteriosas circunstancias murió un hombre en Barrio Abajo
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Sin embargo, el caso de Erik Alfonso Gómez no estaba exento de antecedentes. Según informaron las autoridades, el hombre había sido capturado el pasado 7 de diciembre de 2024 en el barrio Barlovento, donde se le incautaron una granada de fragmentación y dos panfletos extorsivos. Estos elementos lo vinculaban a actividades delictivas, situación que genera interrogantes sobre las posibles razones detrás del ataque que terminó con su vida.
A pesar de estos antecedentes, el hecho de que el ataque ocurriera de manera tan directa y premeditada sugiere una posible retaliación o ajuste de cuentas en el marco de conflictos delictivos en la ciudad. Las autoridades han iniciado una investigación para esclarecer los móviles del homicidio y dar con los responsables del crimen.
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Este asesinato se suma a una alarmante serie de hechos violentos que evidencian el impacto de la criminalidad en Barranquilla. La ciudadanía reclama mayores esfuerzos en seguridad por parte de las autoridades, mientras los expertos insisten en la necesidad de estrategias integrales que combatan tanto las manifestaciones de violencia como las raíces sociales y económicas que las alimentan.
