Hay consternación en dos familias del departamento tras conocerse el ataque sicarial que se perpetró sobre las 10:40 de la noche de este lunes y que empañó de sangre la tranquilidad de todos Los florencianos, quienes después de dos meses vuelven a saber de un homicidio
Bala sin piedad
Dos jóvenes qué se encontraban por el sector del parque de zona rosa en un establecimiento de bebidas alcohólicas, fueron asesinados con impacto de arma de fuego, al parecer sicarios llegaron acabar con la vida de Gentil Guevara al parecer este joven trata de defenderse y hay un intercambio de disparos qué género temor a todos los asistentes que habían en ese momento en los diferentes establecimientos nocturnos, de acuerdo a lo que indican algunos ciudadanos la otra víctima quién es identificada como Cristian Orlando Rivera, estaba por el lugar pero no tenía nada que ver con este hecho, él, en medio del temor trata de defenderse y termina siendo impactado en la cabeza.
No sobrevivieron
Las dos personas perdieron la vida en el lugar de los hechos, los cuerpos quedaron tendidos uno sobre un anden y el otro sobre la mitad de la vía con los rostros ensangrentado ya que las balas perforaron el cráneo y el pecho de cada uno, no hubo nada que hacer porque la muerte fue inmediata pese a qué algunas personas trataron de auxiliarlos no había la mínima posibilidad que resistieran al violento ataque. Los sicarios huyeron en una motocicleta FZ de color negro, con sus armas empuñadas listas para disparar por si alguno se atrevía a perseguirlos.
Al lugar llegaron uniformes de la Policía quienes de inmediato activaron un plan de seguridad para hacer el cierre de toda la ciudad y desplegar un amplio operativo para lograr identificar inicialmente la motocicleta en la que se movilizaban los asesinos y posteriormente dar con el paradero de ellos para ponerlos ante la justicia. Se trabaja con algunas cámaras de seguridad para tratar de hacer un seguimiento al recorrido que esos hombres tuvieron y en qué sector se habían escondido para evitar ser capturados por las autoridades.
Cristian Orlando, trabajaba en diferentes oficios en la ciudad de Florencia deja huérfanos de padres a dos menores de edad y gozaba del aprecio de la comunidad al ser reconocido cariñosamente como ‘el gordo’.
