Líderes del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) denunciaron un incremento alarmante de amenazas contra comuneros y guardias indígenas por parte de estructuras armadas ilegales. Las intimidaciones incluyen panfletos, llamadas y patrullajes armados cerca de resguardos en municipios como Toribío, Caloto y Corinto.
La Defensoría del Pueblo emitió una alerta temprana ante el riesgo de desplazamientos masivos y ataques selectivos. Mientras tanto, el gobierno nacional reiteró su compromiso con el diálogo, pero no descarta operativos militares si se confirman planes de atentado. Las comunidades exigen respeto por su autonomía y mayor presencia institucional en el norte del Cauca.
