Comunidades indígenas del norte del Cauca rechazaron el vil asesinato de la niña Flor Nohemy Quiguanás, de 14 años de edad oriunda de la vereda La Marqueza. Según el informe entregado por las autoridades ancestrales, el crimen habría sido perpetrado por el señor José Oliverio Tenorio Chocué integrante del resguardo indígena de San Francisco quien al parecer torturó y posteriormente apuñaló a la menor hasta quitarle la vida.
Los indígenas agregaron el mortal hecho se presentó en el territorio El Playón Naya perteneciente al municipio de Jambaló, norte del Cauca. Según versiones extra oficiales la niña salió de una fiesta y a la madrugada la interceptaron en el camino, el hecho se habría presentado debido a un rechazo sentimental al agresor.
Líderes de la región implementaron varios controles en el territorio con el objetivo de dar con el paradero del implicado y de esta forma poder ser juzgado. “Esto es algo desgarrador, cortar el ciclo de vida de una mujer indígena, y más de una adolescente, constituye un acto violento de extrema vulneración de los derechos de la mujer, de la adolescencia y de los pueblos indígenas, toda vez, que por el hecho de ser mujer representa para nuestra cultura fuente de vida y pervivencia”, indicaron.



