En Duitama 80 menores de edad fueron hallados en fiesta clandestina

En un operativo conjunto, la secretaría de gobierno de Duitama y la Policía Nacional desarticularon una fiesta clandestina en la vereda San Lorenzo. La intervención se dio en la noche tras el llamado de algunos padres de familia, quienes alertaron sobre la realización de un evento en el que participaban decenas de adolescentes sin supervisión adecuada.
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Los hechos

Al llegar al sitio, los uniformados encontraron alrededor de 80 menores de edad dentro de un establecimiento que operaba sin los permisos requeridos. En el lugar se evidenció el consumo de bebidas embriagantes, lo que agravó la situación, ya que la presencia de
alcohol en reuniones con menores está estrictamente prohibida por la ley colombiana.

El coronel encargado del procedimiento, explicó que tras la intervención se procedió con el restablecimiento de derechos de los menores, activando los protocolos correspondientes con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Así mismo, se
impusieron comparendos a los organizadores, y se selló el lugar de manera inmediata, como lo establece la normatividad vigente.

Desde la administración municipal reiteraron que ningún establecimiento está autorizado para realizar este tipo de eventos, especialmente cuando involucran a menores y consumo de alcohol. Las autoridades enfatizaron que continuarán realizando controles rigurosos para evitar que estos escenarios se repitan en la ciudad.

En medio de la situación, padres de varios de los adolescentes hallados en el sitio, manifestaron su inquietud: “Uno como padre a veces confía, pero entre muchachos se encubren muchas cosas. Ahora debemos asumir las consecuencias por actos que, aunque
no aprobamos, terminan recayendo sobre nosotros. Es necesario no bajar la guardia y revisar siempre dónde y con quién están nuestros hijos.”

Pero ojo, es necesario aclarar que aquí la responsabilidad es compartida. Los propietarios de los establecimientos tienen la obligación de cumplir con la ley, los padres deben ejercer vigilancia constante, y los mismos menores están llamados a entender las implicaciones legales y personales de sus decisiones desde temprana edad.

Además de los procesos administrativos, los progenitores podrían enfrentar sanciones económicas, ya que la normatividad establece que en estos casos los padres deben responder pecuniariamente por las infracciones cometidas por sus hijos menores de edad
durante este tipo de actividades ilegales. Sin embargo, esto hasta el momento no ha sido mencionado por los entes encargados.


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