Al acoger la solicitud de la Fiscalía, el Juzgado 29 Penal Municipal de Cali, con funciones de control de garantías, impuso medida de aseguramiento en establecimiento carcelario contra 14 personas y detención domiciliaria para dos más, señaladas de pertenecer al grupo delincuencial Los Escorpiones, dedicado a la venta y distribución de estupefacientes.
Los asegurados son: Germán Zapata, Madeleine Camacho, Billy Ferrer, Brayan Rivera, José Quintero, Ronal Quintero, Miguel Ortega, Sandra Caicedo, Yonathan Oropeza, Elizabeth Benítez, Julián Moreno, Sebastián Vega, Karen Encarnación, Iván Zapata, Édison Cárdenas y María López.
La Fiscalía les imputó cargos a estas personas por su presunta responsabilidad en los delitos de concierto para delinquir agravado; tráfico, fabricación y porte de estupefacientes; cohecho por dar u ofrecer; y fabricación, tráfico y porte de armas de fuego, accesorios, partes y municiones.
Según la investigación, la banda Los Escorpiones operaba en los barrios San Bosco, San Pascual y Sucre, en el centro-oriente de Cali, donde distribuía y comercializaba marihuana, bazuco y cocaína, en la modalidad de menudeo, afectando los entornos de tres colegios.
Durante la investigación, agentes de Policía Judicial Sijín lograron infiltrarse en la organización haciéndose pasar por presuntos compradores de alucinógenos, para individualizar a cada miembro de la estructura. Se estableció entonces que vendían un promedio de 700 dosis diarias de alucinógenos, lo que les daba una ganancia aproximada de $150.000.000 semanales y de $600.000.000 mensuales.
‘Los Escorpiones’ comercializaban la droga utilizando la modalidad de servicio a domicilio o venta pública en el parque cultural Jovita.
Los 16 imputados fueron detenidos durante 17 operativos de registro y allanamiento en 6 barrios de la ciudad, coordinados por un fiscal de la Estructura de Apoyo (EDA). En las diligencias fueron incautados 8.109 dosis de bazuco, 2 kilos de cocaína, marihuana empacada, 100 cigarrillos del alucinógeno, $7.450.000 en efectivo, 40 cartuchos para revólver calibre 38, 8 teléfonos celulares y dos motocicletas, con las que al parecer realizaban las entregas a domicilio.
En las audiencias concentradas ninguno de los procesados aceptó los cargos endilgados.
