Con gran entusiasmo y el respaldo de su hinchada, el equipo Locos por el Fútbol debutó en la Copa Telepacífico enfrentando a Estudiantes de Cali, en un compromiso que terminó con un marcador de 2-2. El partido, disputado en el estadio Ciro López de Popayán este miércoles 20 de agosto a las 12:00 del mediodía, fue un verdadero espectáculo para quienes asistieron con el bono solidario de $5,000 pesos.
Desde el pitazo inicial, los caucanos saltaron a la cancha con la tradicional camiseta naranja y la convicción de dejar en alto el nombre del departamento. El encuentro se planteó con gran intensidad en la mitad de la cancha, con Locos por el Fútbol buscando la posesión del balón y Estudiantes intentando sorprender con rápidos contragolpes.
El primer gol llegó a favor del conjunto visitante, luego de un error defensivo en salida que permitió a Estudiantes abrir el marcador con relativa facilidad. Sin embargo, la reacción de los naranjas no se hizo esperar. Con orden en el mediocampo, movilidad en las bandas y un empuje ofensivo constante, Locos por el Fútbol logró equilibrar las cargas. Una jugada colectiva de precisión, que incluyó varios toques rápidos, terminó en los pies de su delantero, quien definió con absoluta serenidad dentro del área rival para decretar el empate parcial y encender el ánimo en las tribunas.
La segunda mitad mantuvo la intensidad. Ambos equipos salieron con determinación en busca de los tres puntos, sin especular en ningún momento. Estudiantes volvió a ponerse arriba en el marcador gracias a un potente disparo de media distancia que sorprendió al portero caucano, quien poco pudo hacer para detener la pelota. Pese al golpe anímico, la garra y la entrega del conjunto local no permitieron que el partido se les escapara tan fácilmente.
Con el aliento de su hinchada y el empuje de sus jugadores más experimentados, Locos por el Fútbol adelantó líneas y buscó el arco contrario con insistencia. El esfuerzo tuvo recompensa: tras una serie de aproximaciones peligrosas, consiguieron nuevamente la igualdad, demostrando carácter y corazón en un partido vibrante que mantuvo la emoción hasta el pitazo final.