Pese a la disminución de las precipitaciones en gran parte del municipio, algunas zonas rurales de Ibagué aún se ven afectadas por las lluvias, provocando emergencias puntuales que han requerido atención inmediata.
Dos de los sectores más afectados han sido las veredas Cañadas Potrerito y Los Cauchos Altos, donde la Alcaldía ha desplegado maquinaria amarilla para atender la situación.
Las labores, que se realizan bajo la coordinación de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, incluyen la remoción de deslizamientos, reconstrucción de cunetas y mejoramiento de las vías rurales para garantizar la movilidad y prevenir nuevas afectaciones en estas comunidades.
“Durante el fin de semana, concentramos esfuerzos en puntos críticos como el corregimiento 15, vereda Los Cauchos Altos, y en el corregimiento 16, vereda Cañadas Potrerito. Allí logramos atender emergencias ocasionadas por las lluvias y avanzar en la rehabilitación vial en sectores clave”, afirmó David Ávila, titular de la dependencia.
Gracias al leve descenso de las lluvias, se ha podido extender el trabajo de la maquinaria amarilla a otras veredas como San Cayetano Alto, Tapias, Toche, El Retiro, La Veta, Chucuní, Cural La Tigrera y El Tambo, donde se ejecutan acciones de mantenimiento y adecuación de vías terciarias, vitales para el transporte de productos agrícolas y el tránsito de los pobladores.
Estas acciones son fundamentales para garantizar la conectividad en el sector rural y mitigar el impacto de las lluvias en zonas con alta vulnerabilidad. La Administración Municipal ha reiterado su compromiso con las comunidades campesinas, priorizando la atención de los sectores más afectados.
Asimismo, se recordó a la población rural que, ante cualquier situación de emergencia, se deben comunicar con los presidentes de junta de acción comunal, quienes son el canal directo con los ingenieros encargados de cada zona para coordinar la atención.
El trabajo articulado entre comunidad, líderes veredales y autoridades locales ha permitido una respuesta más oportuna frente a los retos que deja la temporada invernal, especialmente en caminos y vías de difícil acceso.
Finalmente, la Alcaldía reitera a la ciudadanía que continúan habilitadas las líneas de atención 123 y 119, a través de las cuales se pueden reportar emergencias tanto en la zona rural como urbana del municipio.
Con estas acciones, Ibagué sigue avanzando en la consolidación de una infraestructura rural más resiliente, que responda a las necesidades de sus habitantes y contribuya al desarrollo económico y social del campo.
