La Embajada de Colombia en Estados Unidos rechazó categóricamente la decisión del gobierno norteamericano de descertificar al país en la lucha contra las drogas, medida anunciada por el presidente Gustavo Petro y posteriormente confirmada por Washington.
En un comunicado oficial, la misión diplomática señaló que la decisión “desconoce los avances sustantivos alcanzados en materia de interdicción, cooperación judicial y transformación de los territorios afectados por economías ilícitas”.
Sin sanciones, pero con impacto político
Si bien la descertificación no trae consigo sanciones económicas ni la suspensión de programas bilaterales, la medida representa un fuerte cuestionamiento a los compromisos internacionales de Colombia en la lucha contra el narcotráfico.
Estados Unidos aclaró que continuará apoyando la cooperación en seguridad y programas conjuntos, pero calificó a Colombia como un país que ha incumplido de manera manifiesta sus obligaciones internacionales.
Defensa de los avances
La Embajada enfatizó que, entre 2024 y 2025, Colombia logró cifras históricas en incautaciones de cocaína y destrucción de laboratorios, debilitando de manera significativa las finanzas de las organizaciones criminales. También destacó el número récord de extradiciones hacia EE. UU. como prueba del compromiso colombiano.
“Con hechos verificables, Colombia ha demostrado significativos resultados en la lucha contra el narcotráfico. Al mismo tiempo, la cooperación judicial con Estados Unidos se fortaleció como nunca antes”, aseguró la representación diplomática.
Exigen corresponsabilidad
El comunicado también hizo un llamado a una “corresponsabilidad real” en la lucha antidrogas, señalando la necesidad de que los países consumidores reduzcan la demanda y enfrenten el tráfico de armas que fortalece a las organizaciones criminales.
“El éxito de esta lucha depende de un esfuerzo compartido, orientado a la seguridad regional y global. Colombia continuará trabajando con Estados Unidos y sus aliados, reiterando la necesidad de replantear la política global de drogas y de abandonar mecanismos unilaterales de evaluación”, indicó la embajada.
Un debate abierto
La descertificación reaviva el debate sobre la política internacional contra las drogas y el papel de Colombia como principal productor de cocaína. Mientras el gobierno defiende los resultados obtenidos, la oposición advierte que la medida puede afectar la credibilidad del país en la arena internacional.




