El Gobierno colombiano confirmó que estudiará la posibilidad de iniciar acercamientos con el Tren de Aragua, luego de recibir una solicitud formal de su presunto jefe en Colombia, Larry Amaury Álvarez Núñez, alias Larry Changa, quien manifestó su intención de acoger a esta organización criminal en los procesos de la política de Paz Total.
El documento, firmado por la Oficina del Alto Comisionado para la Paz (OACP) y dirigido al abogado Luis Gustavo Moreno, representante legal de Larry Changa, señala que el Gobierno “valora profundamente el interés genuino” del grupo en participar en iniciativas sociales y de reinserción.
“Reconocemos la voluntad expresada por su representado de contribuir a la construcción de paz en el país. Valoramos profundamente su interés genuino en formar parte de esta política pública esencial para el Gobierno liderado por el presidente Gustavo Petro”, se lee en la respuesta oficial.
La decisión final está en manos del presidente Petro
Aunque el documento abre la puerta a eventuales conversaciones, la OACP aclaró que la decisión final sobre iniciar un proceso formal corresponde exclusivamente al presidente Gustavo Petro.
“Su petición será remitida al despacho del señor Presidente (…) para que, en el marco de sus facultades, le dé respuesta de fondo”, precisa la comunicación.
Un grupo bajo la lupa internacional
El Tren de Aragua es considerado por las autoridades colombianas y de otros países como una de las estructuras criminales más peligrosas y expansivas de América Latina, con actividades que incluyen extorsión, homicidios, trata de personas y narcotráfico.
El eventual diálogo con esta organización generaría un fuerte debate político, pues el grupo ha sido catalogado como terrorista en varios países de la región.
Condiciones del proceso
La Oficina del Alto Comisionado reiteró que cualquier acercamiento dependerá del cese de actividades delictivas y de la voluntad real de contribuir a la paz y la justicia social. La solicitud será ahora evaluada por el Gobierno Nacional, que deberá determinar si existen las condiciones para abrir una vía formal de conversación con esta organización.




