La gobernadora del Tolima, Adriana Magali Matiz, lanzó una fuerte advertencia sobre la fiebre amarilla y reconoció que la situación habría sido incontrolable si no se hubieran tomado medidas urgentes. “Si no se hubieran tomado las acciones a tiempo, estaría incontrolable el tema de fiebre amarilla”, afirmó.
La mandataria entregó un balance alentador, destacando que 749.000 tolimenses ya han sido inmunizados contra esta grave enfermedad, evitando una tragedia mayor. No obstante, alertó que se han confirmado 107 contagios y 37 fallecimientos, todos en personas que rechazaron el biológico.
“De los 107 casos, ninguno aceptó recibir la dosis. Incluso los dos recientes positivos en Ataco desistieron de hacerlo. Esto nos duele, porque eran muertes evitables”, señaló Matiz.
En el encuentro con alcaldes y personal sanitario, también participó Katherine Rengifo, secretaria de Salud del Tolima, quien respaldó el llamado de urgencia de la gobernadora. “Ha sido un esfuerzo articulado entre todos los municipios. Pero necesitamos mayor conciencia ciudadana”, sostuvo la funcionaria.
Matiz reiteró que el único camino para prevenir más muertes es el compromiso con el esquema preventivo. “Esto no es opcional. Es la única herramienta que tenemos para proteger la vida”, insistió.
Finalmente, la mandataria reconoció la labor de los hospitales, brigadas móviles y alcaldías, que siguen recorriendo el departamento. Las jornadas continúan en marcha, y las autoridades recalcaron que no hay justificación para no acceder a este derecho.
