La desaparición de Erika Fernanda Perdomo, madre de dos hijos menores, ha conmocionado a la comunidad de Cartagena del Chaira, Caquetá, y especialmente al municipio de Solita, donde residió por largo tiempo. El secuestro, ocurrido el pasado 13 de octubre, ha desatado una ola de indignación y temor en la región, mientras las autoridades aún no logran dar con su paradero.
El secuestro
La víctima habría sido vista por última vez alrededor de las 9:00 a.m., cuando dos hombres fuertemente armados y con el rostro cubierto, la obligaron a salir de un local ubicado en el puerto Relleno de Marimbas, en Cartagena del Chaira.
Las cámaras de seguridad del establecimiento captaron el momento en que los individuos llegan al sitio, toman a la mujer por la fuerza y se la llevan en un vehículo con destino desconocido. Desde ese instante, no se ha tenido información concreta sobre su situación, lo que ha generado una creciente preocupación entre familiares, amigos y vecinos.
Las exigencias
El impacto de la desaparición de la fémina ha sido profundo en Solita, donde vivió y formó su hogar. Las personas cercanas a ella, junto con organizaciones defensoras de derechos humanos, han alzado la voz, exigiendo que se respeten los derechos de la víctima y se acelere la búsqueda. Los habitantes del municipio han realizado múltiples manifestaciones, clamando por el regreso seguro de Erika. “No podemos permitir que estos hechos sigan ocurriendo. Queremos a Erika con vida y de vuelta con sus hijos”, expresó uno de los líderes comunitarios.
Las indagaciones
A pesar de la presión social y mediática, la investigación parece avanzar lentamente. Según fuentes extraoficiales, ya se ha interpuesto la denuncia ante las autoridades, quienes estarían revisando los registros fílmicos y recopilando testimonios para dar con los responsables del plagio. Sin embargo, hasta el momento no hay información sobre los motivos detrás de este crimen, lo que aumenta la frustración entre la población que exige resultados inmediatos.
Clamor
Este lamentable hecho ha resonado en todo el departamento del Caquetá. Las redes sociales se han inundado de mensajes pidiendo su pronta liberación, y cada vez más personas se suman a la campaña para visibilizar el caso. La comunidad no cesará en su lucha hasta que la madre desaparecida regrese a su hogar. Mientras tanto, la incertidumbre y el temor siguen creciendo, en espera de respuestas concretas por parte de las fuerzas de seguridad.
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Pie de foto: Erika Fernanda Perdomo, afectada.
