El París Saint-Germain ha revelado su alineación titular para el crucial enfrentamiento de esta noche por la UEFA Champions League frente al Bayern Múnich. En una de las pruebas más exigentes de la temporada, el conjunto parisino apuesta por una mezcla de juventud, equilibrio táctico y poder ofensivo para intentar dar el primer golpe en esta serie europea.
En el arco, el encargado de custodiar la portería será Chevalier, quien recibe la confianza del cuerpo técnico tras sus sólidas actuaciones recientes en la liga local. La defensa estará compuesta por Hakimi y Nuno Mendes en los laterales, con la dupla central formada por Marquinhos, que portará el brazalete de capitán, y Pacho, uno de los refuerzos más prometedores del equipo.
En la zona media, el PSG buscará imponer su ritmo con la juventud y energía de Zaire-Emery, acompañado por Vitinha y Fabián Ruiz, tres jugadores capaces de alternar funciones defensivas y ofensivas. Este tridente será clave para controlar la posesión y evitar que el conjunto bávaro imponga su presión característica en la mitad del campo.
Más adelante, el técnico ha apostado por un tridente ofensivo que combina desequilibrio, velocidad y talento: Barcola y Dembélé ocuparán las bandas, mientras que el georgiano Khvicha Kvaratskhelia, una de las grandes incorporaciones del verano, será la carta principal en ataque. Su capacidad para romper líneas y generar ocasiones será determinante frente a una defensa alemana de alto nivel.
En el banquillo destacan nombres de peso como Safonov, Renato Marin, Lucas Beraldo, Lee Kang-in, L. Hernández, Mayulu, Njoantou y João Neves, quienes ofrecen variantes tácticas tanto en defensa como en ataque. La profundidad del plantel le permitirá al entrenador ajustar el planteamiento según el desarrollo del partido.
El equipo parisino llega a este compromiso con la necesidad de dar un golpe de autoridad en Europa, torneo que sigue siendo su gran obsesión. La presencia de Kvaratskhelia, sumada al liderazgo de Marquinhos y al desequilibrio de Dembélé, genera ilusión entre los aficionados, que esperan una versión más sólida y ambiciosa del PSG.
Con esta alineación, el club francés demuestra que busca equilibrio entre experiencia y renovación, apostando por una estructura compacta y dinámica. El reto será frenar el poder ofensivo del Bayern y aprovechar las transiciones rápidas que tanto caracterizan a su estilo. París se prepara para una noche europea decisiva en la que el PSG aspira a dar un paso firme hacia la gloria continental.
