Este proyecto busca que se puedan entregar herramientas tecnológicas recuperadas de incautaciones o por hurto (que no hayan sido reclamadas durante un período de 12 meses) a las Instituciones Educativas para promover la educación de niños, niñas y adolescentes en todo el país. Según el representante a la cámara, Héctor Chaparro, hay más de tres millones de niños y niñas sin acceso a tecnología para su educación, mientras que en las estaciones de Policía hay cerca de 20 mil equipos incautados sin uso que pueden ayudar a cerrar la brecha digital que afecta principalmente a los estudiantes de las zonas más apartadas de Colombia.
Este proyecto había sido presentado anteriormente por el exrepresentante Rodrigo Rojas; sin embargo, le faltó un solo debate en el trámite de la legislatura pasada para llegar a ser Ley de la República, razón por la cual el representante Chaparro lo quiere sacar a flote. Según opinan algunas personas es un buen proyecto que beneficiaría a gran parte de la población, en especial a los niños que no tienen acceso a estos recursos, pues las cosas incautadas se quedan ahí por un largo tiempo y nadie las reclama, sin embargo, los niños si podrían darle un buen uso a ellas, por ahora falta la aprobación del proyecto para que dado el caso se pueda empezar a ejecutar.

															


