El ‘profe’ dijo adiós en Duitama

Luto en la Perla de Boyacá.
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La familia Patarroyo Lasprilla se encuentra de luto por la partida del docente José Manuel, un hombre que, según sus alumnos y colegas, fue responsable y virtuoso, asegurando que se ganó el cariño de decenas de personas por su carisma y amor para enseñar, indicando que cada día que llegaba a las aulas era una experiencia memorable, pues su manera de suministrar el conocimiento era única.

Condolencias

Luego de enterarse de la triste partida del docente José Manuel, la Cooperativa especializada en ahorro y crédito, Coeducadores Boyacá, fue una de las primeras que se pronunció, enviando mensaje de condolencia a sus familiares y amigos más cercanos.

“Coeducadores Boyacá lamenta la partida de este insigne educador, cooperativista de gran valía quien por lapso de cuarenta y tres años perteneció como asociado a nuestra gran familia solidaria. A toda su familia, paisanos de Firavitoba, amigos, educadores y cooperativistas, nuestra sentida voz de condolencia y que el buen Dios de poder y de gloria le conceda el merecido descanso en la eterna morada”.

Su paso

El docente fue reconocido por su manera de enseñar, pues su dedicación y amor por su trabajo lo llevó ganarse el cariño de sus alumnos, con el paso del tiempo, el maestro se convirtió en coordinador y rector de la Institución Educativa Pedro José Sarmiento, de la municipalidad de Socha, lugar en el que trabajo por varios años.

De igual manera, el Coeducadores se desempeñó como coordinador de la provincia de Valderrama, del departamento boyacense, durante más de diez años, y ejerció como integrante del Consejo de Administración, desempeñándose como el presidente del comité de auditoría. Actualmente hacía la función de vicepresidente del Comité de Política Interinstitucional.

Despedida

Luego de la partida del maestro boyacense, su hijo Manuel Alejandro Patarroyo Corredor se pronunció, dando un mensaje de amor cargado de nostalgia y tristeza. “Papá, mi gran maestro, amigo y confidente. No sabes la falta tan inmensa que me vas hacer, no te imaginas la gran admiración y gratitud que siento por tu vida. Fuiste el ángel más hermoso que la vida me pudo regalar, gracias por caminar conmigo y guiarme en la vida, te aseguro que tu legado será guardado por siempre. Descansa mi viejito, descansa de todas tus dolencias y angustias. Te amaré por siempre, y estarás en mi corazón por la eternidad. Te amo papá, vuela alto que tu misión esta cumplida”.


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