‘Chuzaron’ al cura en Neiva

Un sacerdote identificado como Ángel Alberto Pardo Medina fue apuñalado en medio de un hurto.
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En un alarmante episodio de inseguridad, el párroco de la iglesia Nuestra Señora de Aránzazu, Ángel Alberto Pardo Medina, de 69 años, resultó herido con un arma blanca en un violento atraco ocurrido en Neiva.

Los hechos

El incidente tuvo lugar aproximadamente a las 5:30 de la tarde cuando el sacerdote caminaba por una vía pública de la ciudad. Más específicamente por la calle 7 con carrera 27 del barrio La Gaitana, en la comuna Siete.

De acuerdo a las versiones proporcionadas por la comunidad, el sacerdote fue interceptado por delincuentes que lo intimidaron con un cuchillo. En medio del pánico y el forcejeo, los asaltantes aprovecharon la situación para agredirlo físicamente, propinándole una certera puñalada a la altura de la clavícula.

Las Reacciones

Inmediatamente después del ataque, los agresores huyeron del lugar llevándose consigo el teléfono móvil y dejando al religioso gravemente herido y con un peligroso sangrado.

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Vecinos del sector, al percatarse de lo ocurrido, acudieron rápidamente en su auxilio. De inmediato, fue trasladado hacia un centro asistencial de la capital huilense en donde fue hospitalizado para recibir atención médica debido a la severa lesión sufrida durante el atraco.

La Rabia

La comunidad local ha hecho un llamado urgente a las autoridades, solicitando al mandatario local, Germán Casagua, que tome medidas inmediatas para mejorar la seguridad en la ciudad. Los ciudadanos demandan acciones concretas que brinden mayor protección a los neivanos y eviten que se repitan actos delictivos similares.

La Inseguridad

La iglesia Nuestra Señora de Aránzazu, ubicada en una zona que debería ser segura para sus feligreses. Se ha convertido en un símbolo del creciente problema de delincuencia que afecta a la región. Este incidente resalta la necesidad de implementar estrategias efectivas para combatir los crímenes y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.

La situación del padre Pardo Medina, quien ha dedicado su vida al servicio de la comunidad. Pone de manifiesto la urgencia de abordar la inseguridad con determinación y eficacia.

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Pie de foto: Ángel Alberto Pardo Medina, afectado


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