“El oro debe quedarse”

El concejal Franky Vega cuestionó la falta de inversión nacional en el sur del Huila.
[responsivevoice_button voice="Spanish Latin American Male" buttontext="Escuchar Noticia"]
Compartir en

El concejal Franky Vega encendió el debate político tras su pronunciamiento sobre la incautación de 42 kilos de oro en Pitalito, un hecho que captó la atención nacional luego de que el presidente Gustavo Petro sugiriera convertir ese metal en una réplica del Tesoro de los Quimbayas o destinarlo a causas internacionales como la Franja de Gaza.

Sin embargo, Vega planteó una propuesta con enfoque territorial: que, en caso de confirmarse la ilegalidad del oro y su paso a las arcas del Estado, los recursos se inviertan en la creación de la Universidad del Macizo Colombiano, un antiguo proyecto académico y científico promovido desde el sur del país.

Críticas

Durante su intervención en el Concejo de Pitalito, Vega no se guardó críticas al Gobierno Nacional. “Este gobierno está mirando dónde coloca las obras y las inversiones, pero aquí en el Huila no se ha hecho ni una”, afirmó con tono firme.
El cabildante insistió en que el Consejo debe pronunciarse de manera unificada, dejando un precedente sobre la necesidad de que los recursos provenientes del territorio beneficien al territorio, en lugar de destinarse a iniciativas ajenas a la región.

“Probablemente no nos van a leer, como suele pasar con las proposiciones que salen desde la provincia, pero al menos quedará el precedente de que el Huila no se quedó callado”, enfatizó Vega, en un discurso que resonó entre sus colegas y la opinión pública local.

Desarrollo y autonomía

La propuesta del concejal busca revivir un antiguo sueño académico: construir un centro de investigación y formación superior en el predio Marengo, proyectado en su momento por Cormagdalena como un espacio de desarrollo científico ligado al Macizo Colombiano.

Para Vega, destinar los recursos del oro incautado a esa causa sería una reparación simbólica y estructural para una región históricamente olvidada. “Esta clase de ideas son las que nos deben mover. No se trata de oro ni de monumentos, se trata del futuro de nuestra gente”, concluyó.

Con un tono crítico pero esperanzador, el concejal dejó clara su posición: el oro incautado en Pitalito no debería convertirse en una estatua ni en un gesto diplomático, sino en una oportunidad dorada para invertir en conocimiento y equidad territorial.


Compartir en

Te Puede Interesar