El gobierno de Venezuela anunció un refuerzo militar en sus fronteras occidentales y marítimas en medio del aumento de tensiones con Estados Unidos. Las Fuerzas Armadas Bolivarianas desplegaron nuevas unidades, equipos de defensa aérea y patrullas en zonas estratégicas, con el argumento de proteger la soberanía nacional ante “posibles provocaciones externas”.
El ministro de Defensa venezolano informó que el despliegue forma parte de una operación de “vigilancia integral”, que incluye ejercicios conjuntos entre el Ejército, la Armada y la Aviación. Las maniobras se concentran especialmente en el litoral caribeño y en los límites con Colombia, donde se ha incrementado la presencia de tropas y vehículos blindados.
Caracas ha denunciado en repetidas ocasiones la presencia de aviones estadounidenses en el espacio aéreo cercano a su territorio, mientras Washington acusa al gobierno venezolano de facilitar operaciones ilícitas y de fortalecer vínculos con potencias rivales.
Analistas consideran que este refuerzo militar marca un nuevo episodio en la disputa geopolítica entre ambos países, y refleja el intento del gobierno de Nicolás Maduro de mostrar fortaleza interna en medio de las crecientes presiones internacionales.



