Con la astucia propia de quien se gana la vida con esfuerzo, una joven emprendedora de Pitalito logró frustrar lo que parecía ser un intento de estafa callejera. En un video difundido en redes sociales, se observa a un sujeto a quien los internautas ya apodaron ‘Alias mano larga’ intentando engañar a la vendedora con un billete de cincuenta mil pesos.
El hombre, con aparente calma, pide un frito y paga con el billete de alta denominación. Sin embargo, segundos después, dice tener “sencillo” y le pide de vuelta el dinero con la intención de que la mujer se confunda y le entregue las devueltas sin haber verificado el cambio.
La rápida reacción de la joven evitó que la estafa se concretara. “No solté el billete ni un segundo. Me di cuenta de que quería enredarme con las vueltas”, relató la afectada, quien aseguró que el sujeto huyó del lugar al no lograr su cometido.
El caso de ‘Alias mano larga’ ha reavivado el debate sobre la inseguridad silenciosa que enfrentan los vendedores informales y pequeños comerciantes del municipio. Muchos aseguran que este tipo de estafas ocurren con frecuencia, especialmente en zonas de alto flujo comercial, pero pocas veces se denuncian por miedo o desconocimiento.
“Estos delincuentes juegan con la distracción y la necesidad de la gente. No roban con armas, pero sí con mañas”, comentó un comerciante del centro de Pitalito, quien pidió mayor presencia de la Policía y campañas de prevención.
Autoridades
Tras la difusión del video, las autoridades locales iniciaron un proceso de verificación para identificar al presunto estafador y prevenir nuevos casos. La Policía del Huila instó a la ciudadanía a denunciar formalmente estos hechos y evitar transacciones sin precaución.
“Queremos recordar que los intentos de estafa son delitos y deben ser reportados. Estamos revisando las cámaras de seguridad y la denuncia ciudadana ayudará a avanzar en la investigación”, señaló una fuente policial.
La historia de la joven emprendedora se ha vuelto viral, no solo por su valentía, sino también como lección de precaución. En medio de una economía golpeada y con el auge del rebusque, cada peso cuenta.
Alias ‘mano larga’ no solo quedó expuesto por su fallido intento, sino también como símbolo de una realidad cotidiana: la lucha constante de quienes, con trabajo honesto, enfrentan las trampas de la picardía ajena.
