Además del cartel de los más buscados por los actos vandálicos que se presentaron este domingo en el estadio Pascual Guerrero de Cali, las autoridades están buscando prioritariamente al hombre que, desde la parte alta de la tribuna sur del estadio, atacó con un cañón de fuegos artificiales, a los policías que intentaron contener la situación en medio de la final de la Copa BetPlay entre América y Atlético Nacional que se jugó el domingo 15 de diciembre.
El sujeto, que aunque intentó ocultar su rostro con un gorro y un tapabocas, quedó plenamente identificado por las cámaras de seguridad del escenario deportivo en un momento en que se quitó el objeto que cubría su boca y nariz. La acción de este hombre, integrante de la barra Barón Rojo Sur, se hizo viral en redes sociales, pues, “armado” con una especie de tatuco para lanzar pólvora, le apuntó a los uniformados que se acercaron a la tribuna sur para restablecer el orden luego de que en el minuto 85 del compromiso, decenas de hinchas saltaron a la cancha y otros más desprendieron sillas, baterías sanitarias y lanzaron objetos contundentes al terreno de juego buscando lesionar no solo a los uniformados sino también a los jugadores de ambos equipos.
Aunque inicialmente el alcalde de Cali, Alejandro Eder anunció una recompensa de hasta $30 millones por los casi 50 responsables de estos actos violentos, el coronel Germán Manrique, subcomandante de la Policía Metropolitana de Cali confirmó que solo por este hombre las autoridades están ofreciendo una recompensa de 50 millones de pesos.
