Durante su permanencia en la cárcel El Buen Pastor, la empresaria e influencer bogotana Daneidy Barrera Rojas, más conocida como Epa Colombia, encontró en el emprendimiento una forma de aliviar su condena. Para ello, decidió fabricar manillas artesanales, una actividad que le permitió optar por el beneficio de redención de pena mediante trabajo y estudio.
Gracias a este esfuerzo, Epa Colombia logró reducir su sentencia entre 25 y 27 días, una disminución mínima en comparación con el tiempo que debía cumplir, pero que refleja la intención de la influencer por adaptarse a las normas del sistema penitenciario.
La elaboración de las manillas no solo fue vista como un intento por acortar su condena, sino también como una muestra de resiliencia frente a las difíciles condiciones de reclusión. Este episodio se suma a la polémica historia de la empresaria, quien se hizo conocida por sus escándalos en redes sociales y posteriormente por su incursión en el mundo empresarial con productos para el cuidado capilar.




