
Desde Puerto Tejada, Cauca, surge una de las nuevas promesas del fútbol colombiano: MIGUEL HURTADO, conocido en su tierra natal y en la cancha como El Emperador. Con apenas 20 años, el lateral izquierdo se ha consolidado en las filas del Internacional de Palmira, equipo con el que disputa el campeonato de la segunda división del fútbol nacional. Su velocidad, potencia y capacidad para proyectarse en ataque le han permitido convertirse en pieza clave de la plantilla vallecaucana.
Hurtado se distingue por su resistencia, precisión en los centros y visión de juego. Estas cualidades, sumadas a su disciplina y constancia en los entrenamientos, le han abierto un camino que lo perfila como uno de los jugadores a seguir en el balompié colombiano. En el terreno de juego, además de su solidez defensiva, demuestra liderazgo y carácter, características que lo han llevado a ganarse el respeto de sus compañeros y el reconocimiento de la hinchada.
En Puerto Tejada, familiares, amigos y vecinos lo motivan diariamente, convencidos de que el talento de Miguel lo llevará a alcanzar grandes escenarios, no solo en Colombia sino también a nivel internacional. Para muchos, su historia es la muestra de que la disciplina y el esfuerzo permiten que los sueños se hagan realidad.
Aunque el camino no ha sido fácil, Miguel ha sabido sortear las dificultades propias de un joven deportista que lucha por consolidar su carrera profesional. Su mentalidad fuerte y el respaldo de su entorno cercano lo han sostenido en este proceso, en el que ya comienza a brillar con luz propia.
“El Emperador” de Puerto Tejada avanza con paso firme. El sueño apenas comienza y el fútbol colombiano tiene en él a un jugador destinado a dejar huella.
Pie: MIGUEL HURTADO, futbolista.

