Esta semana, en las oficinas del Deportes Tolima, se finiquitó la rescisión de contrato de Michael Rangel con la institución. El cuadro ‘Pijao’ terminó de manera unilateral el vínculo contractual del delantero santandereano por justa causa, puesto que se comprobaron actos de indisciplina. A partir de la fecha, el goleador quedará como agente libre y podrá negociar con cualquier equipo pensando en 2023.
Apenas se pudo conocer la noticia, de inmediato la hinchada de América de Cali comenzó a reclamar a las directivas para que se haga un esfuerzo por su fichaje, considerando que fue el último jugador que pudo ganar una bota de oro vistiendo la camiseta escarlata. Los recuerdos de su papel en 2019 están latentes y todavía más considerando que el equipo necesita un ‘9’ efectivo en el área.
A comienzos de este año, cuando Rangel terminó su contrato con el Junior de Barranquilla, el equipo escarlata sí lo buscó, como llegó a confirmarlo el mismo jugador. Sin embargo, no hubo un contacto directo entre las partes al no haber sido considerado para el proceso de Juan Carlos Osorio. Ahora, hay un técnico que le sacó provecho como nadie, Alexandre Guimarães.
Recientemente, Tulio Gómez, máximo accionista del club, volvió a hablar sobre este jugador, cuando se refería a la nómina para el próximo año. Comentó que tanto Rangel como Rodrigo Ureña le habían comentado que querían regresar al América. Ambos jugadores salieron a medios a desmentirlo, pero quedó la prueba de que sí existe una intención de volver a contar con ellos.
