Las comunidades de Segovia y Remedios, Antioquia, se volcaron a las calles para recibir el féretro del pequeño Maximiliano Tabares Caro, el niño de 6 años que fue asesinado por una secta satánica conformada por su madre, su padrastro, su abuela materna y tres personas más.
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Desde la ciudad de Medellín fue trasladado el cadáver de Maximiliano Tabares Caro en un vuelo hasta el sector de Otú de Remedios y desde ahí en una caravana hasta Segovia, lugar donde será su funeral.
Una gran consternación ha causado el asesinato del niño Maximiliano de 6 años, tanto así que la comunidad sigue rechazando lo ocurrido e intentan encontrar respuestas justas a lo sucedido.
“No puedo creer que la persona que le dio la vida a este niño, a este angelito, fue la misma persona que se la quitó. Da mucha tristeza, mucha rabia, da indignación que sea la propia madre quien le haya hecho esto a este pobre angelito”, aseguró Valeria Jaramillo, habitante de Segovia.
Sobre cómo serán las exequias de Maximiliano Tabares Caro, el abogado Andrés Felipe Bedoya, defensor de la familia, explicó que “son recibidos por toda la comunidad, entiendo que se velará en la sala de la casa de la abuela paterna en el barrio 7 de agosto y el día de mañana serán sus exequias, una misa a las 3 de la tarde en el cementerio del municipio”.
Cabe recordar que la muerte del pequeño Maximiliano fue a manos de la secta satánica que se hace llamar “Los Carneros”, y se habría realizado en medio de un ritual para hallar una mina de oro.
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El proceso judicial contra las seis personas involucradas en el asesinato del menor, entre ellas la madre, el padrastro y la abuela materna, sigue adelante, mientras que los responsables se encuentran recluidos en cárceles de máxima seguridad.
