JULIO 25 VALLE DE CAUCA :Manuel Restrepo no solo es un ingeniero de sonido o un productor musical. Es, ante todo, un oyente disciplinado, un enamorado del sonido que desde los cuatro años aprendió a cerrar los ojos para dejarse llevar por la aguja de una tornamesa. Hoy, con una trayectoria que incluye colaboraciones con artistas de talla nacional e internacional, y una vida dedicada a la formación, Restrepo es el profesor del taller de masterización sonora impartido por Estudios de Grabación Takeshima.

«Pasaba más horas frente a un equipo de sonido que en el colegio», recuerda Restrepo, rememorando su infancia en Buenaventura, donde su padre, gracias a su trabajo en el puerto, lograba traer vinilos que se volvieron su verdadera escuela. De ahí en adelante, su vida ha sido una constante evolución que empezó con una guitarra acústica.
Restrepo no tardó en descubrir que su camino no estaba solo en interpretar, sino en construir y perfeccionar el sonido. «Yo estaba al servicio de la música», afirma, relatando cómo una lesión grave en la mano le impidió seguir tocando profesionalmente, pero lo llevó a descubrir la producción y más adelante la masterización, campos en los que ha trabajado con figuras como Mauro Castillo, Oscar Iván Lozano, Hugo Candelario y Tony Succar, entre otros.
Restrepo compartió esa pasión que lo ha acompañado toda la vida: escuchar con profundidad. Desde su estudio, montado en 2018, ha comprendido que la producción musical no es solo una disciplina técnica, sino un compromiso emocional y humano. «Esto no es una carrera para cogerla de hobby. Es una verdadera carrera profesional, muy, muy exigente. Te pone a prueba en todo: emocionalmente, psicológicamente, y hasta el bolsillo», sentencia.
desde los 19 años y hoy forma parte del comité de la Audio Engineering Society (AES) en Cali. Para él, pertenecer a este comité “ha sido uno de los honores más bonitos” y le ha permitido visibilizar el potencial del mercado caleño. Recuerda con entusiasmo el Congreso de Audio en el CCI de 2022: “Fue full house. Y Cali se puso en el mapa”.
Su labor con la AES ha permitido fortalecer los vínculos entre educación, industria y comunidad.




