La trabajadora social Yesica López, de la Fundación Oriéntame, lidera el programa SABEIS en instituciones educativas, fortaleciendo la formación de estudiantes en derechos, autocuidado y toma de decisiones responsables.
La sexualidad dejó de ser un tema exclusivo de la intimidad familiar y poco a poco ha ganado espacio en los escenarios educativos. Con la implementación de programas como Sabeis (Salud, Bienestar y Educación Integral en Sexualidad), liderado por la Fundación Oriéntame, instituciones educativas de distintas regiones del país buscan ofrecer a niños, niñas y adolescentes herramientas para comprender su cuerpo, construir relaciones sanas y ejercer sus derechos.
El enfoque integral de la estrategia va más allá de la enseñanza biológica sobre la reproducción. Incluye dimensiones emocionales, sociales y culturales que permiten a los estudiantes fortalecer su autoestima, aprender a comunicarse de manera respetuosa y prevenir situaciones de riesgo como el embarazo adolescente, las infecciones de transmisión sexual y la violencia basada en género.
Acompañamiento
“La educación en sexualidad no se trata solo de prevenir embarazos o enfermedades, sino de formar ciudadanos que sepan tomar decisiones responsables, libres e informadas sobre su vida”, explicó Yesica López, trabajadora social de la Fundación Oriéntame y orientadora del programa en los colegios de Ipiales.
La propuesta pedagógica integra talleres participativos, juegos, debates y acompañamiento docente, con el fin de romper mitos y tabúes que históricamente han limitado la conversación sobre el tema. Además, incluye espacios de diálogo con familias para fomentar la comunicación en casa y fortalecer la corresponsabilidad en el proceso educativo.
Prevención
De acuerdo con expertos, la educación integral en sexualidad es clave para reducir problemáticas sociales que afectan a la juventud y para garantizar el cumplimiento de los derechos sexuales y reproductivos. Sin embargo, aún enfrenta retos en los colegios, entre ellos la resistencia cultural de algunos sectores y la necesidad de capacitar a más maestros en un enfoque inclusivo y científico.
Yesica López resaltó que el objetivo es transformar los entornos educativos en espacios seguros y respetuosos, donde los estudiantes puedan expresar dudas y adquirir conocimientos sin miedo a la discriminación o al señalamiento.
Transformación
Con este tipo de iniciativas, la escuela se consolida como un escenario fundamental no solo para el aprendizaje académico, sino también para el desarrollo humano y la construcción de una sociedad más respetuosa, equitativa y consciente.
En el proceso también participaron docentes de distintas instituciones como Yesica Cumbal, Jhon Zambrano, Deivid Toro y Héctor Chamorro, quienes coincidieron en que la educación integral en sexualidad es una herramienta esencial para acompañar a los estudiantes en la construcción de proyectos de vida sólidos, alejados de riesgos y fundamentados en el respeto propio y hacia los demás.



