Un intenso cruce de palabras protagonizaron el concejal de Ibagué, Giovanni Martínez, y el exconcejal Eduard Toro en un debate público donde se abordaron temas de gestión municipal y liderazgo político. El encuentro evidenció las tensiones que existen al interior del partido Centro Democrático y la polarización en torno a la administración de la alcaldesa Johana Aranda.
La controversia comenzó cuando Eduard Toro calificó a Martínez como «el concejal pandereta», en referencia a lo que considera una falta de seriedad en los debates del cabildo. Toro afirmó que Martínez ha asumido una postura complaciente frente al Gobierno Municipal, limitándose a aplaudir sus decisiones en lugar de ejercer control político. Uno no puede llegar al Concejo a ser un comité de aplausos; hay que tener claros los principios constitucionales, declaró Toro, quien también cuestionó el uso de los recursos públicos asignados al concejal, específicamente los 70 millones de pesos anuales destinados a su equipo de asesores. Según Toro, estos recursos no se están aprovechando adecuadamente debido a la deficiente asesoría que se brinda desde el equipo del concejal.
La comunidad señala que, al parecer el concejal de La Martinica, se le subió el ego y no trabaja por la ciudad.
En respuesta, Giovanni Martínez tomó con ironía los señalamientos y transformó la crítica en un elogio. La pandereta es sinónimo de alegría y prosperidad, y eso es lo que busco transmitir, afirmó Martínez. Además, defendió su trabajo como concejal, destacando su cercanía con las comunidades rurales y el respaldo que recibe de su familia y de los ciudadanos. Martínez también criticó la posición de Toro frente a la administración de Johana Aranda, asegurando que su constante actitud negativa fue uno de los motivos por los cuales el exconcejal perdió su curul.
Durante el debate, Toro enfatizó su experiencia como exconcejal, señalando que él ya se graduó en ese rol, mientras que Martínez apenas lleva dos semestres. A su vez, destacó que, durante la campaña de Johana Aranda, él fue el encargado de diseñar las propuestas para la zona rural, las cuales hoy forman parte del Plan de Desarrollo Municipal. Sin embargo, Toro expresó su inconformidad con el actual Concejo, argumentando que no se han dado los debates importantes que necesita la ciudad. El Concejo pasado le aprobó más de 900 mil millones de pesos para el presupuesto de 2024, pero usted, concejal, no ha hecho los grandes debates que Ibagué necesita, puntualizó Toro.
Por su parte, Giovanni Martínez evitó responder a todos los señalamientos de manera directa, pero reiteró su apoyo a la alcaldesa Johana Aranda y defendió su gestión como concejal. Mi trabajo está respaldado por la confianza de las comunidades y eso es lo que me motiva a seguir adelante, aseguró Martínez. Además, pidió tiempo para que los resultados de la administración comiencen a reflejarse en la ciudad y reiteró su compromiso con las comunidades rurales de Ibagué.
