Ecopetrol, la petrolera estatal colombiana, ha dado un paso significativo hacia su transición energética al adquirir el 100 % del proyecto Windpeshi, desarrollado hasta ahora por Enel Colombia en la península de La Guajira.
El parque eólico está ubicado entre los municipios de Uribia y Maicao, con una capacidad instalada de 205 MW, que se traducen en 41 aerogeneradores de 5 MW cada uno. Se espera que Windpeshi produzca aproximadamente 1.006 GWh al año, lo que cubriría entre el 8 % y el 9 % de la demanda energética del Grupo Ecopetrol.
El coste de adquisición fue de US $50 millones, y el desarrollo del proyecto contempla una inversión total cercana a los US $350 millones entre 2025 y 2027. Con la reactivación de obras prevista entre finales de este año y principios de 2026, se espera que el parque inicie operaciones efectivas para 2028.
Uno de los componentes más relevantes de esta operación es el enfoque en el diálogo con las comunidades indígenas Wayúu, que habitan la zona de influencia del proyecto. Ecopetrol ha anunciado que promoverá espacios de diálogo intercultural con líderes tradicionales para asegurar una consulta previa efectiva, algo que ya había representado un obstáculo importante que frenó el desarrollo del proyecto cuando estuvo en manos de Enel.
Asimismo, Ecopetrol firmó un Acuerdo Marco de Inversión (AMI) con AES Colombia para participar también en el clúster eólico Jemeiwaa Ka’, mediante la adquisición del 49 % de un portafolio que suma cerca de 1.087 MW, incluyendo líneas de transmisión de 35 km que permitirán conectar al Sistema Interconectado Nacional y apoyar la generación de hidrógeno verde.
Este doble paso marca la primera incursión directa de Ecopetrol en proyectos renovables no convencionales con impacto nacional, en línea con la meta de alcanzar 1.000 MW de capacidad limpia para 2030.
El proyecto representa beneficios ambientales estimados en la reducción de unos 4,8 millones de toneladas de CO₂ al año, y contribuye a la descentralización energética y al desarrollo regional en una zona históricamente rezagada como La Guajira.
No obstante, el avance no está exento de desafíos: resistencia social, demoras en permisos regulatorios y la fragilidad de la infraestructura de transmisión eléctrica siguen siendo obstáculos potenciales para el éxito del proyecto.
En resumen, Ecopetrol está fortaleciendo su rol como actor clave en la transformación energética del país, apostando por la energía eólica en La Guajira, con una estrategia que combina inversión, diálogo con comunidades indígenas y sostenibilidad ambiental.
