El delantero colombiano Duván Vergara no ocultó su emoción tras disputar, en la tarde del domingo, un intenso partido en La Bombonera que finalizó con empate a un tanto entre Racing Club y Boca Juniors. En declaraciones posteriores al encuentro, el jugador de la Academia expresó que cumplir con ese momento había sido un sueño personal desde sus inicios como futbolista profesional.
Vergara describió la experiencia como algo que quedará grabado para siempre en su memoria. “De por sí, fue algo especial para mí. Era un sueño personal jugar en este estadio. Realmente se me erizó la piel”, afirmó con una sonrisa que evidenciaba la intensidad del momento vivido en la mítica cancha xeneize.
El atacante, que llegó a Racing para potenciar el frente ofensivo, confesó que desde niño seguía la mística que envuelve al estadio de Boca Juniors y que pisar ese césped por primera vez como jugador profesional superó cualquier expectativa. Más allá de la igualdad en el marcador, para él fue una tarde marcada por la historia y la atmósfera única del lugar.
Vergara también destacó la pasión de la hinchada y cómo esta se hace sentir incluso desde el calentamiento previo. Según comentó, la atmósfera, los cánticos y la cercanía del público con el terreno de juego generan una energía que contagia a cualquiera, sin importar la camiseta que vista.
El futbolista aseguró que momentos así le recuerdan por qué eligió dedicarse a este deporte, pues le permiten vivir emociones que van más allá de la competencia misma. “Esto es lo que uno soñaba cuando era niño, poder jugar en estadios que respiran fútbol y sentir la historia en cada rincón”, señaló.
Aunque la tarde en Buenos Aires estuvo marcada por la intensidad del partido, Vergara afirmó que tuvo un instante para detenerse y observar el lugar, intentando guardar en su mente cada detalle. “Quería que quedara grabado para siempre, porque no todos los días se cumple un sueño como este”, agregó.
Ahora, con ese capítulo personal cumplido, Duván Vergara se enfocará en seguir aportando a Racing Club en la temporada, pero siempre con la satisfacción de haber vivido uno de los momentos más significativos de su carrera. Para él, La Bombonera ya no es solo un estadio legendario, sino un escenario que quedará ligado a su historia futbolística para siempre.
