En un operativo sin precedentes, las autoridades de Florencia, Caquetá, ordenaron la demolición de dos viviendas que funcionaban como centros de venta y almacenamiento de estupefacientes en el barrio Rodrigo Turbay, reconocido por el accionar de redes dedicadas al microtráfico.
Estos inmuebles habían sido intervenidos en tres oportunidades mediante diligencias de allanamiento, realizadas entre 2024 y 2025, donde fueron capturadas personas en flagrancia, además de incautarse drogas y elementos para su distribución. Dichas evidencias confirmaron que los lugares eran utilizados como expendios fijos de droga.
La demolición fue autorizada por el alcalde de la ciudad, Marlon Monsalve, con base en las facultades otorgadas por el Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana, debido al vínculo comprobado entre estas propiedades y actividades ilícitas que afectan la tranquilidad de la comunidad.
Este procedimiento hace parte de la ofensiva permanente de las autoridades contra el microtráfico en la capital caqueteña, que ya suma 16 inmuebles destruidos desde 2024, como parte de una estrategia enfocada en recuperar espacios deteriorados por la delincuencia.
La Policía Nacional y la Fiscalía reiteraron que continuarán ejecutando operativos contundentes para desmantelar las estructuras criminales dedicadas al tráfico de drogas, reafirmando su compromiso con la seguridad ciudadana.
Los habitantes del sector manifestaron su respaldo a las acciones adelantadas, destacando la importancia de estos operativos para devolver la tranquilidad a los barrios afectados por la venta de estupefacientes. Las autoridades aseguraron que no bajarán la guardia en su lucha contra este flagelo.



