Donald Trump, en la mira tras revelarse correos de Epstein que lo vinculan con los abusos: “Sabía lo de las chicas”
Nuevos documentos del archivo del fallecido magnate Jeffrey Epstein han vuelto a sacudir el panorama político de Estados Unidos. Entre miles de correos electrónicos revelados por el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, destacan varios mensajes en los que Epstein asegura que el expresidente Donald Trump “sabía lo de las chicas”, en alusión a los crímenes de explotación sexual cometidos por el financista.
Las comunicaciones, fechadas entre 2011 y 2019, muestran a Epstein en contacto con figuras cercanas como Ghislaine Maxwell y el periodista Michael Wolff. En uno de los correos, el magnate sostiene que Trump habría pasado “horas” en su mansión de Palm Beach junto a una joven, que más tarde sería identificada por los investigadores como Virginia Giuffre, una de las principales víctimas del entramado de abuso que rodeaba a Epstein.
Otra serie de mensajes revela que, incluso años después, Epstein seguía haciendo referencia a Trump, insinuando que el entonces presidente “sabía” lo que ocurría en sus círculos más privados y que, lejos de denunciarlo, habría pedido a Maxwell “mantener las cosas en silencio”.
La publicación de este material, realizada por congresistas demócratas, ha generado una nueva tormenta política. Mientras la Casa Blanca y los abogados de Trump califican los correos como “una maniobra partidista” y un intento por “difamar al presidente”, las revelaciones reavivan las dudas sobre qué tanto conocía el exmandatario acerca de los delitos sexuales de Epstein y por qué nunca se distanció públicamente de él.
Expertos en ética y transparencia señalan que, aunque los correos no constituyen evidencia judicial directa, sí plantean serios cuestionamientos sobre la conducta y el círculo íntimo de Trump durante años. “No se trata solo de si cometió un crimen, sino de lo que sabía y calló. Su silencio puede interpretarse como complicidad moral”, afirmó la analista política Linda Hollis.
La polémica llega en un momento crucial para Trump, quien busca consolidar su liderazgo político de cara a las elecciones de 2026. Sin embargo, los nuevos documentos podrían erosionar aún más su imagen pública y alimentar la percepción de que fue parte, por acción u omisión, del encubrimiento del mayor escándalo de abuso sexual de la élite estadounidense.




