Dos jóvenes quedaron registrados en cámaras de seguridad, donde se evidenció como estos forcejearon una de las rejas y rompieron un candado para ingresar al polideportivo con la excusa de que este sería de uso público.
El pasado 3 de mayo en horas de la noche habrían sonado las alarmas del barrio por unos jóvenes que ingresaron sin autorización al polideportivo, por lo que Eliana Garzón, quien es presidenta de la Junta de Acción Comunal, alertó a las autoridades.
“Daniel Polo me llamó, me pidió permiso para usar el polideportivo, le dije que no porque estaba en obras, horas más tarde me llamo Pablo González con la misma petición por lo que le repetí lo mismo y al rato sonaron las alarmas del barrio”, manifestó Garzón.
Cierre
Según comentó la presidenta, el polideportivo habría cerrado porque estarían una obra que mejoraría según ella la estructura del mismo, además que estarían pintando las gradas y demás partes de la cancha, razón por la cuál habrían puesto la regla de que nadie podría ingresar hasta que la obra fuese completada.
“También tomamos la decisión en comunidad de ponerle rejas al polideportivo porque no solo venían deportistas, también algunos bandidos que se sentaban a consumir, dejar latas de cerveza e incluso sus eses fecales, y aquí hay muchos niños que quieren utilizar de forma adecuada el lugar, pero cuando se encuentran con estas cosas pues se desmotivan”, explicó la presidenta.
Contraste
Por otro lado, los jóvenes quienes habría ingresado manifestaron que la mujer nunca les habría comunicado que no podrían hacer uso del polideportivo alegando que el espacio es de uso público y que la presidenta les habría dicho que ella tenía la potestad de sacarlos si quería porque según ellos la responsable les habría gritado que era la dueña y que podía decidir quién entraba y quién no puede a qué tenía autorización por parte del imder .
“Ella vino y nos quería sacar a las malas y nosotros no somos ningunos drogadictos ni nada por eso, hasta traíamos el balón para jugar porque eso es todo lo que queríamos, pero ella llamó a la policía, nos gritó y nos trató como delincuentes y la verdad no estamos de acuerdo que encierran el polideportivo porque eso limita la recreación a la hora que ella quiera prestar la cancha y eduque no es la dueña por más que sea la encargada”, comento Daniel Polo uno de los presuntos implicados.
