La violencia no da tregua en Buenaventura y una vez más enluta a una familia y consterna a toda una comunidad. Esta vez, el barrio El Progreso, ubicado en la comuna 10 del Distrito, fue escenario de un nuevo hecho de sangre que dejó como víctima mortal a un hombre identificado como John Jader Castro Quiñones, conocido por los habitantes del sector como “El Flaco”.
Caso
El trágico suceso se registró cuando, según las primeras versiones, varios hombres no identificados llegaron hasta la vivienda de Castro y, en circunstancias que aún son materia de investigación, le propinaron varios disparos de arma de fuego. El estruendo de los proyectiles alertó a los vecinos, quienes, impulsados por la angustia, ingresaron al lugar para encontrar una dolorosa escena: John Jader yacía sin vida. Inmediatamente, dieron aviso a las autoridades, y al poco tiempo, patrullas de la Policía Nacional, en conjunto con unidades de la Sijin, hicieron presencia en el lugar para realizar la inspección técnica al cadáver y dar inicio al proceso de recolección de evidencias que permitan esclarecer este crimen. Castro era conocido entre sus vecinos por su apodo “El Flaco” y por su comportamiento tranquilo. De acuerdo con quienes lo conocían, se ganaba la vida realizando oficios varios. Lo recuerdan como una persona trabajadora, dedicada y respetuosa, alguien que no solía involucrarse en problemas y que era bien recibido por la comunidad. “Era un muchacho muy callado, siempre laborando como pintor de casas y demás oficios, haciendo lo que podía para ganarse la vida. Nadie entiende por qué alguien le haría esto”, comentó un vecino que prefirió no revelar su nombre por temor a represalias.
Dolor
Este nuevo caso se suma a la preocupante ola de violencia que vive el Distrito portuario, una ciudad que, pese a los esfuerzos institucionales, sigue viendo cómo sus barrios se convierten en escenarios de dolor e incertidumbre para las familias. Los habitantes del barrio golpeados por este hecho, piden que se haga justicia y que no se convierta en una cifra más que engrose las estadísticas de homicidios en la ciudad. Ante estos hechos, líderes sociales y comunitarios alzaron su voz para exigir acciones concretas tanto a las autoridades distritales como al gobierno nacional. “La violencia está desbordada. Cada semana tenemos noticias de asesinatos o enfrentamientos. No podemos seguir viviendo con miedo. Necesitamos respuestas claras, presencia del Estado, garantías de seguridad y oportunidades para nuestros jóvenes”, manifestó una lideresa comunitaria de la comuna 10.
