En la tercera sesión del Puesto de Mando Unificado -PMU para el control de medicamentos, el Instituto Departamental de Salud de Nariño alertó sobre el aumento en el porcentaje de medicinas no entregadas, que pasó del 19% en abril al 31% en junio, a pesar del seguimiento permanente y exhaustivo realizado en articulación con entidades como la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría, las secretarías y direcciones locales de Salud.
Si bien se han implementado planes de mejora y acciones conjuntas, el Instituto Departamental de Salud de Nariño advierte que el problema es estructural.
La deuda acumulada de las EPS con los gestores farmacéuticos en Nariño supera los 74 mil millones de pesos, situación que compromete seriamente el abastecimiento de medicamentos y la continuidad de la atención a los usuarios.
Sumado a lo anterior, una nueva alerta se genera por la posible suspensión de servicios en los hospitales mentales San Rafael y Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, donde las deudas acumuladas por parte de las EPS alcanzan los 88 mil millones de pesos, generando problemas de liquidez y poniendo en riesgo la atención en salud mental.



