DESTRUYEN RED DE ARMAMENTO ILEGAL

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La Policía Nacional de Colombia sigue dando golpes decisivos contra las organizaciones criminales. En un operativo realizado en el municipio de Magüí Payán, Nariño, se desmanteló un depósito ilegal con un arsenal bélico que amenazaba la seguridad de la región. Esta acción forma parte de la estrategia del gobierno para neutralizar a los grupos armados y sus estructuras de poder en el país.

El operativo fue fruto de un trabajo articulado entre la Policía y otras autoridades locales. La intervención permitió la incautación de diversas armas de fuego y material explosivo. Este tipo de depósitos ilegales son claves para las bandas criminales, que los utilizan para reforzar su capacidad de ataque contra la Fuerza Pública y la población civil en las zonas rurales.

Las armas incautadas incluyen tres fusiles de asalto, una ametralladora, dos pistolas de 9 milímetros y dos lanzagranadas de 40 milímetros. Según las autoridades, este arsenal estaba destinado al Grupo Armado Organizado Residual Ariel Aldana, una de las bandas más activas en la región de Nariño. El material bélico habría sido utilizado para intensificar los enfrentamientos con la Fuerza Pública y perpetrar actos violentos en las comunidades.

El coronel John Jairo Urrea, comandante del departamento de Policía de Nariño, resaltó la importancia de este hallazgo. Según él, la incautación de este arsenal golpea directamente las capacidades operativas de la estructura armada. Esto reduce significativamente el poder de fuego de los grupos ilegales y contribuye a la seguridad de la población en el municipio.

Este operativo también refleja el avance de la ofensiva nacional contra el multicrimen en Nariño. Las autoridades aseguran que la desarticulación de este tipo de depósitos es clave para frenar las actividades ilícitas de los grupos armados organizados. Además, se refuerza la lucha contra el tráfico ilegal de armas, uno de los principales motores de la violencia en la región.

La Policía Nacional sigue comprometida con la seguridad de los colombianos. En Nariño, la situación sigue siendo compleja, pero con operativos como este, se está logrando debilitar a las organizaciones criminales. Las autoridades reafirmaron su compromiso de continuar con las acciones de desarme y desarticulación de las estructuras delictivas en todo el país. Las fuerzas de seguridad también destacaron el trabajo conjunto con la comunidad, la cual ha sido clave en la ubicación de los depósitos ilegales.


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