Las imágenes que se han hecho virales muestran cómo las disidencias de las Farc perpetran ataques cobardes en El Plateado, Cauca, afectando tanto a la Fuerza Pública como a la población civil. Estas imágenes demuestran una clara ventaja de los grupos criminales, lo que ha llevado a diversos sectores a pedir al Gobierno nacional reactivar los bombardeos contra estas organizaciones, que parecen tener el control de la situación. En los videos se observa cómo las comunidades tratan de recoger sus pertenencias para huir del escenario de guerra, mientras los miembros de los grupos criminales lanzan explosivos contra los mismos pobladores. Incluso se escuchan niños atemorizados por lo sucedido.
El martes 18 de junio, el comando de las Fuerzas Militares emitió un comunicado en el que aseguran que: «Con el objetivo de avanzar en la modernización de las diferentes herramientas que permitan a las tropas garantizar la seguridad, defensa y protección de la población civil… ya están avanzadas las gestiones logísticas y administrativas para la adquisición de sistemas contra Aeronaves No Tripuladas (C-UAS) Antidrones».
El general Helder Fernan Giraldo Bonilla, Comandante de las Fuerzas Militares, confirmó que estos equipos servirán para prevenir, detectar, identificar, decidir y neutralizar drones, empleados por los grupos al margen de la ley en actuaciones que atenten contra la población civil, la infraestructura crítica, las tropas y las instalaciones militares.
Lo que llama la atención es que las Fuerzas Militares de Colombia, durante años, se han caracterizado por manifestar que siempre iban un paso adelante de las organizaciones al margen de la ley. Sin embargo, la declaración del alto mando evidencia que, en esta ocasión, mientras el Estado gestiona la adquisición de un sistema antidrones en el Cauca, los delincuentes ya están causando dolor y caos con estos artefactos.
