Como se logró evidenciar, la comunidad vulnerada por grupos armados al margen de la ley, pertenecen a la jurisdicción de Tumaco provenientes de las veredas Chilvicito y Pilares quienes mediante un crudo testimonio especificaron las condiciones que los impulsaron a abandonar sus hogares y pertenecías.
En la capital de Nariño, llegaron alrededor de 80 tumaqueños pertenecientes a las veredas afectas por la violencia entre grupos armados, entre el registro de desplazados se logró identificar que existe población infantil.
Según información extraoficial otorgada por la comunidad a las autoridades competentes en Pasto, en medio del conflicto armado, dos grupos criminales han efectuado en estas zonas rurales de Tumaco un completo campo de batalla, esto a raíz de la disputa territorial enmarcada en el narcotráfico. Igualmente, el testimonio de los afectados especificó que fueron amenazados por los grupos ilícitos, dándole un plazo de 12 horas para abandonar sus hogares de lo contrario serian asesinados.
La información fue validada por el secretario de Gobierno de Pasto Carlos Bastidas, quien resaltó que en el municipio se presenta la atención década a la población vulnerable por el flagelo de la violencia, ocupando así dos alberges adecuados por la municipalidad.
De igual forma se estima que las autoridades competentes dentro del distrito tumaqueño puedan tomar cartas en el asunto frente a la denuncia de estas familias damnificadas por la violencia, posibilitando así su retorno adecuado y seguro en las veredas mencionadas.
