Lo que debía ser un solemne acto de despedida se convirtió en un escenario de violencia y caos. Durante el cortejo fúnebre de un ser querido, una riña entre los asistentes desató pánico y desconcierto en las calles. El altercado ocurrió mientras la comitiva se dirigía hacia el cementerio municipal.
Testigos presenciales reportaron que lo que parecía una discusión menor entre algunos de los asistentes rápidamente se intensificó, derivando en un enfrentamiento físico. Los involucrados utilizaron piedras, palos y hasta armas cortopunzantes, lo que provocó temor entre quienes presenciaban la situación. Lo que era un ambiente de dolor y respeto por el difunto, pronto se tornó en una escena de descontrol, alarmando a la comunidad y a quienes se encontraban cerca del lugar.
La magnitud de la pelea obligó a algunos asistentes a llamar de inmediato a las autoridades. Las unidades policiales acudieron al sitio en respuesta a la emergencia, logrando intervenir y dispersar a los participantes en la riña antes de que los hechos tomaran un desenlace más trágico. La intervención de las fuerzas del orden fue fundamental para evitar que la situación escalara aún más.
Según las primeras versiones de los testigos, la disputa podría haberse originado por viejas rencillas personales entre algunos de los asistentes al funeral, quienes no lograron controlar sus diferencias en ese momento tan sensible. Sin embargo, las autoridades están investigando los detalles del enfrentamiento para determinar las causas exactas del altercado y si habrá cargos contra los responsables de la violenta situación.




