En el operativo fueron capturadas 11 de sus integrantes, sindicados de hurto y porte ilegal.
La operación fue el resultado de un minucioso trabajo investigativo por parte de la Seccional de Investigación Criminal (SIJIN) de Cundinamarca, cuyos uniformados llevaron a cabo dos órdenes de registro y allanamiento en distintos puntos de la ciudad. Como resultado, fueron capturados 11 individuos que integraban la estructura criminal, y se incautaron elementos clave en la comisión de los delitos, como una motocicleta y un arma de fuego utilizadas para intimidar a las víctimas y llevar a cabo los atracos.
El modus operandi de «Los Cadeneros» era bastante claro: empleaban el raponazo y el atraco para despojar a sus víctimas de sus pertenencias, especialmente cadenas de oro que portaban turistas. Estos delincuentes solían actuar con gran violencia, intimidando a sus víctimas con armas de fuego, y se centraban en zonas turísticas de gran afluencia, como Girardot, Fusagasugá, Ricaurte, Melgar, Ibagué y Flandes.
Con la captura de los integrantes de esta banda, la Policía y la Fiscalía esclarecieron un total de 17 casos de hurto denunciados, en los que se estima que «Los Cadeneros» obtuvieron rentas criminales superiores a los 170 millones de pesos. Este golpe a la delincuencia organizada no solo afecta la economía ilícita del grupo, sino que también brinda un respiro a las comunidades y turistas que frecuentaban las zonas donde operaban, contribuyendo a la seguridad en la región.
