Una operación de la Policía Metropolitana de Bogotá y la Fiscalía General permitió capturar a 40 integrantes de las organizaciones criminales conocidas como los ‘Camerusa’ y los ‘Yeyos’. Durante 11 meses, investigadores recopilaron pruebas mediante interceptaciones, seguimientos y el trabajo de agentes encubiertos. Ambas bandas se dedicaban al tráfico de drogas, el porte de armas y la ejecución de homicidios selectivos.
Los uniformados lograron identificar a los cabecillas de las estructuras criminales. Alias ‘Andrea’ coordinaba la distribución de marihuana y cocaína; ‘El Mono’ asumía la logística; ‘Poquebolas’ se encargaba del ‘Tusibi’; mientras ‘Eliseo’ movilizaba la droga en buses para evitar los controles policiales. Alias ‘Sandra’, fundadora de los ‘Yeyos’, también figura entre los capturados. Incluso un pensionado del Ejército, que usa silla de ruedas, escondía estupefacientes para facilitar el tráfico sin levantar sospechas.
Los delincuentes empleaban métodos creativos y peligrosos para ocultar la droga. En zonas escolares y parques camuflaban estupefacientes en chalecos de pesas puestos sobre perros de razas agresivas. Otros miembros usaban carrieles, coches de bebés y carretillas para aparentar ventas ambulantes. En las noches ofrecían sustancias alucinógenas durante fiestas en discotecas ubicadas en barrios como Restrepo o en municipios cercanos como Mesitas del Colegio y Anapoima.

La operación incluyó 40 allanamientos en localidades como Rafael Uribe, Ciudad Bolívar, San Cristóbal y Usme, así como en Cartagena. Los investigadores incautaron siete armas de fuego, un arma artesanal, 46 libras de marihuana, 15 celulares y 41 millones de pesos en efectivo producto de las ventas. Las autoridades también hallaron símbolos como coronas y marcianos que los delincuentes usaban para identificar su mercancía.
La Policía estimó que estas estructuras criminales generaban más de 120 millones de pesos mensuales con la venta de estupefacientes. En lo que va del 2025, los operativos contra el microtráfico han dejado 913 capturas, un 16 % más que el año anterior. Las autoridades continúan reforzando los controles en zonas escolares, parques y establecimientos nocturnos.
