La investigación por el atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay ha tomado un giro inesperado. La Fiscalía General de la Nación confirmó que el celular del menor de 14 años, señalado como presunto autor del ataque sicarial ocurrido en un mitin político en Fontibón, no aparece.
Fuentes judiciales señalaron que el dispositivo, considerado clave para esclarecer los hechos, desapareció misteriosamente tras la captura del menor. El celular sería una pieza fundamental en la investigación, ya que podría contener conversaciones, instrucciones y posibles vínculos con personas que habrían ordenado el ataque.
Preocupación por la cadena de custodia
El aparato, que debía estar en poder de la Fiscalía bajo cadena de custodia, no ha sido ubicado y se desconoce su paradero actual. El hecho ha generado preocupación entre los investigadores, quienes advierten que su contenido podría ser determinante para la judicialización del menor y para establecer si actuó bajo órdenes de terceros.
En medio del proceso de recolección de pruebas para presentar ante un juez de menores, esta ausencia representa un obstáculo serio para la Fiscalía, que ya tiene los términos procesales a punto de cumplirse para la audiencia de imputación.
Un video clave y sospechas sobre la UNP
Uno de los elementos que ha encendido las alarmas es un video grabado por asistentes al evento, donde se ve cómo un hombre —aparentemente miembro de la Unidad Nacional de Protección (UNP)— se acerca al menor y extrae de su bolsillo lo que sería un teléfono celular. Hasta ahora, no hay claridad sobre si ese dispositivo fue entregado a las autoridades competentes.
Este video será clave para determinar el destino del celular y establecer posibles irregularidades en la actuación de los funcionarios que atendieron el caso inmediatamente después del ataque.
Reacción del Gobierno
En una reciente alocución, el presidente Gustavo Petro pidió una investigación rigurosa sobre la actuación de los miembros de la UNP durante y después del atentado. El jefe de Estado solicitó que se verifique qué medidas tomaron los escoltas presentes y si se siguieron los protocolos correspondientes en una situación de alto riesgo como la ocurrida.
Avanza la investigación
Mientras tanto, la Fiscalía continúa recopilando otros elementos probatorios para sustentar su caso ante el Sistema Penal de Responsabilidad para Adolescentes. Se espera que en los próximos días se aclaren las circunstancias que rodean la desaparición del celular y se establezcan responsabilidades.
El caso no solo ha conmocionado a la opinión pública, sino que ha abierto un debate nacional sobre la participación de menores en delitos de alto impacto y los posibles actores que se esconden detrás de estos crímenes.




