Deportivo Pereira selló su clasificación a los cuartos de final de la Copa Colombia en una noche de drama, tensión y gloria. Aunque cayó 2-1 en el tiempo reglamentario ante Real Cundinamarca en condición de visitante, el equipo dirigido por «San» Rafael Dudamel mostró carácter y corazón para imponerse 4-3 en la tanda de penales, tras un global de 5-5. Una vez más, el técnico venezolano guió a los suyos con su sello: temple en la tormenta.
El partido fue tan complicado como se esperaba. Real Cundinamarca salió con todo a buscar la remontada tras la derrota 3-2 en la ida. A los 40 minutos, Jayder Asprilla Moreno marcó el primero desde el punto penal, y el estadio estalló. El segundo llegó a través de Arney Rocha al minuto 82, justo cuando el Pereira parecía tener todo controlado. El equipo local creía en el milagro.
Sin embargo, Pereira nunca perdió la compostura. A pesar del dominio parcial del rival, el ‘Grande Matecaña’ supo resistir los embates con inteligencia táctica. El gol de Yúber Quiñones al 67′, que fue un verdadero golpe anímico, mantuvo viva la serie para los pereiranos. Ese tanto fue clave para forzar los penales y mantener el sueño copero intacto.
En la tanda, la figura de Salvador Ichazo fue monumental. El arquero atajó y mantuvo el arco firme en el momento más tenso. Del otro lado, los jugadores de Pereira mostraron frialdad, marcaron sus tiros sin pestañear, firmando el 4-3 definitivo en la tanda.
El técnico Rafael Dudamel, bautizado por la afición como “San Rafael” por su capacidad para sacar resultados en situaciones límite, no ocultó su emoción tras la clasificación: “Nos armaron una guerra deportiva, como se debe, pero este grupo sabe sufrir. Este tipo de partidos te forman. Hoy clasificamos con jerarquía”. El venezolano sigue consolidando su proyecto con el equipo risaraldense, que cada vez luce más sólido en todas las líneas.
Deportivo Pereira no solo avanza: también envía un mensaje. Pese a las bajas, el juego físico y la presión del rival, el equipo demostró que está hecho para competir. Con una mezcla de experiencia —como la de Darwin Quintero y Marco Pérez— y sangre joven, el plantel ha encontrado equilibrio. Además, el liderazgo de Dudamel ha sido vital para superar momentos complejos como el de esta serie.
Ahora, el ‘Grande Matecaña’ espera rival en cuartos con la moral en alto. Sabe que aún no ha ganado nada, pero este tipo de partidos encienden la llama del campeón. Pereira sigue soñando, con la copa entre ceja y ceja, guiado por un entrenador que ha hecho de la resiliencia su bandera. Si alguien pensaba que estaban acabados, esta noche quedó claro: Pereira no se rinde.Deportivo Pereira avanza con temple: el ‘Grande Matecaña’ se impone en penales y está en cuartos
