El Deportivo Cali volvió a irse con las manos vacías tras caer 1-0 ante Independiente Santa Fe en el estadio El Campín, en un encuentro donde mostró esfuerzo, pero careció de efectividad. La derrota dejó al equipo sin opciones matemáticas de clasificar y con muchas preguntas sobre lo que será el proyecto deportivo de cara a la temporada 2026, especialmente en torno a la continuidad del técnico Alberto Gamero.
El cuadro azucarero intentó competir de igual a igual, pero le faltó claridad en los metros finales. A lo largo del compromiso registró 16 remates, la misma cantidad de disparos al arco que su rival (2), lo que evidenció la falta de precisión en la definición. Pese a tener momentos de buen manejo del balón, la contundencia volvió a ser el gran ausente en el conjunto verdiblanco.
En la posesión, los vallecaucanos mantuvieron un 44%, frente al 56% de Santa Fe, un reflejo de la dinámica del partido: un Cali que buscó salir con transiciones rápidas, pero que terminó siendo superado por la insistencia del local. La falta de profundidad y el poco peso ofensivo marcaron una constante en los últimos compromisos del equipo.
El duelo también dejó cifras equilibradas en lo físico. Deportivo Cali cometió 10 faltas, la misma cantidad que su rival, y recibió cuatro tarjetas amarillas, producto del desgaste y la frustración de un equipo que no logró sostener su idea de juego ante la presión capitalina. En materia de pelota quieta, los azucareros tuvieron 6 tiros de esquina, aunque sin lograr capitalizarlos en el marcador.
Para Gamero, el resultado representa un golpe duro en un cierre de campaña donde los resultados no acompañaron el esfuerzo colectivo. Si bien el entrenador ha intentado darle identidad al equipo, las dudas sobre su continuidad comienzan a crecer, y desde la dirigencia no se ha confirmado si seguirá liderando el proyecto 2026, que busca una reestructuración profunda.
El técnico ha manifestado en varias oportunidades su deseo de mantener la base del plantel y reforzarlo con jugadores jóvenes, pero los resultados no le han jugado a favor. En Cali ya se habla de una evaluación interna que determinará si Gamero será el encargado de encarar la próxima temporada o si el club buscará un nuevo rumbo en el banquillo.
El Deportivo Cali cerrará su participación en el torneo el próximo jueves a las 7:00 p.m., cuando enfrente al Once Caldas, en un partido que servirá más para cumplir el calendario que para competir por algo concreto. Será, probablemente, la última oportunidad para que el equipo y su técnico envíen una señal de esperanza a una afición que espera cambios profundos y un proyecto sólido para volver a los primeros planos del fútbol colombiano.




